Fincha
Técnica
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Título
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El
dragón rojo
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Autor
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Thomas
Harris
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Editorial
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Grupo
Editorial Random House Mondadori
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Primera
edición en español
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2000
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Impresión
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Barcelona
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ISBN
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84-9759-492-4
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El autor
Thomas Harris, nacido el 11 de
abril de 1940, es un escritor norteamericano reconocido por sus novelas de
suspenso y de corte policial, donde se
da a conocer su más famoso personaje: Hannibal Lecter, Hannibal el canibal0. La
saga consta de un total de 4 novelas: Dragón
rojo, El silencio de los corderos, Hannibal y Hannibal el origen del mal. Sus cuatro obras han sido llevadas al
cine donde icónicamente Anthony Hopkins se convirtió en la cara del caníbal. En
los últimos años fue reinventado el personaje con una serie de nombre Hannibal, que consta de tres temporadas
y Hannibal fue representado por Mads Mikkelsen.
Argumento
Jack Crawford, agente de FBI y
cabeza de la unidad de ciencias del
comportamiento, requiere la ayuda de Will Graham para dar captura a un
esquivo asesino. La ayuda de Graham parece indispensable, a pesar que este no
es un agente oficial; sólo es un profesor de la academia. Sin embargo, la
particularidad de Will Graham es que puede meterse en la mente del asesino. De
hecho, parece que puede reproducir las acciones que llevo a cabo, pero con una
desventaja, recreará la ira, el deseo, la pasión, la sed de sangre, etc. Que
tenía el asesino tanto en el momento de su crimen como de otras acciones.
Personajes[1]
Jack Crawford: Agente del FBI y
cabeza de la unidad de ciencias del
comportamiento, es un hombre calculador de una gran inteligencia. Sin
embargo, como todo ser, tiene sus límites y apoyándose en otros logra sus
objetivos. En este libro si bien tiene una participación principal, su rol se
ve realmente como aquel que organiza y da pie a los sucesos que traerán graves
consecuencias a Will Graham en su afán para atrapar al asesino.
Will Graham: agente especial de
FBI, o por lo menos es el título temporal que adquiere en el trabajo para
atrapar a un asesino, es un profesor de la misma academia de FBI y que ha
ayudado anteriormente a la parte investigativa. Cuando su ayuda es solicitada
por Crawford, Will se hallaba retirado a causa de su anterior colaboración en
atrapar a Hannibal Lecter, lo cual trajo consigo dejarlo al borde de la muerte.
Francis Dolarhyde: de una
infancia bastante sufrida, de labio leporino y su consecuente desarrollo de personalidad múltiple, Dolarhyde es el asesino a capturar (no se preocupen no es despoiler). Un hombre de problemas
para socializar ha encontrado gusto por el asesinato y, en este caso, el de
familias completas. Su obsesión la loa obra de Blake, El Gran Dragón Rojo y la Mujer revestida en Sol, será aquella obra que obsesionará a Francis.
Doctor Hannibal Lecter: es la
primera aparición de icónico personaje de Harris aunque en un papel secundario.
Encerrado en un lugar para asesinos peligrosos y enfermos mentales, vive en un
aislamiento particular. Aunque mantiene
constante contacto con diferentes representantes de psiquiatría y psicología,
tiene limitados cualquier contacto humano. En este libro será un apoyo más,
aunque también acarreará graves consecuencias el que Graham (quien ayudo a
atraparlo anteriormente, lo consulte en su búsqueda de el duende dientudo.
Apreciación personal y crítica.
La novela nos ubica a principios
de los 80, así que no estamos ante la tecnología que ahora podemos recurrir
para atrapar un asesino o un delincuente. Esto es importante puesto que la
forma en que se sigue la investigación para atrapar al asesino carece de
velocidad, no por esto, claro está, hace la novela aburrida.
Hay tres particularidades que
resalto en cuanto a la novela que la hace interesante, y por tanto buena:
Las perspectivas: estamos acá
ante el hecho de que tenemos el seguimiento de la investigación de ambas
partes, del FBI y de Dolarhyde. Es por ello que nombrar que es él el asesino no
te adelante nada relevante de libro. Se lleva una historia paralela entre
perseguidores y perseguidos, entre el gato y el ratón. Esto, me parece a mi,
trae la ventaja de que no te desilusionas en el culmen de la historia el saber
quien es el asesino y cuales sus motivaciones, cosas que pasan seguido en las
novelas policiacas.
El manejo del lenguaje: siendo
una novela policial, realmente Harris tiene un gran bagaje respecto a los
nombres y maneras de investigación. Aunque se queda corto en algunas
deducciones, necesitarás un diccionario al lado (o un dispositivo con internet)
para ampliar tu léxico.
Psicología de los personajes: si
bien el centro de la novela es la persecución de Dolarhyde, la profundidad se logra con la complejidad de los personajes. Tenemos entonces un asesino que no
se queda solo en motivaciones como venganza (no directamente), acceso sexual o
resentimiento. Dolarhyde es una mezcla compleja de razones y circunstancias
desafortunadas. Tenemos también a Graham como un hombre que sufre sus
cualidades biológicas para reproducir la personalidad de cualquier persona,
además de su inestabilidad mental y, por último, Lecter nos deja con esas
ganas, ese sabor, de querer saber más acerca de la forma en que llego a ser
“Hannibal el caníbal”.
Sin embargo no todo puede ser
miel sobre hojuelas. Así, hay tres cosas que le restan un tanto de valor al
libro; dos intrínsecos y uno extrínseco. El extrínseco tiene que ver con la
edición. He encontrado varios errores de edición, lo cual no permite una lectura amena. Por ejemplo, en
la página 36 encontramos la frase “nuevamente se repasaran hay los datos de los hoteles y aeropuertos”, cuando claramente
debería ser “hoy” en lugar de “hay”. En la página 236 está el párrafo: “Luego de
recibir el entrenamiento básico, fue enviado a una escuela especializada en
operaciones de revelado y de ahí trasladado a San Antonio donde trabajó con
películas de entrenamiento médico en el Hospital Militar de Brooke”. En este último debería,
por estilo, ir “fue trasladado” o “se traslado”. En la página 265 aparece: “Un espejo de cuerpo entero colgaba de la pared
del gimnasio que Dolarhyde haabía instalado
en el desván, junto a las barras y al banco con las pesas”; claramente un erros de repetición de letra en “había”.
Entre otros.
Con todo lo anterior dicho
le doy una calificación de 9, y una dificultad de 2 estrellas, una lectura de
dificultad normal. Si bien se le resta bastante por lo anteriormente dicho, la
forma en que se lleva la investigación, llegando muchas veces a callejones sin
salida, junto al profundo tratamiento psicológico de los personajes, hace que
gane bastante valor literario este texto. Espero, entonces, que comiences a
leer este buen texto, pues incluso su final, si no es impactante, si bastante
congruente con el accionar de los diferentes personajes.
Con gusto, su servidor, Reike
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